Tener una cuenta de ahorro es una cosa, pero entender cómo funciona es otra completamente distinta. La verdadera diversión comienza cuando logras comprender el lenguaje de la misma, es decir, sus conceptos básicos.
Vamos a descifrar esas definiciones claves que transformarán esta herramienta financiera en tu aliada. Así, podrás comprender tu cuenta de ahorros como un profesional, sin confusiones y con toda la eficiencia.
¿Has escuchado esta palabra cuando están hablando de finanzas? En términos sencillos, un abono es cuando tomas una cantidad de dinero y la destinas a una cuenta. Cada vez que ahorras, haces un abono o depósito.
Lo opuesto al abono, es cuando extraes dinero de tu cuenta y en este caso, también se le puede llamar “débito”. Si quieres ahorrar como un experto, recuerda la base de todo: abona más de lo que retiras.
¿Sabías que tu dinero puede "crecer" en una cuenta de ahorros? Imagina esto: dejas tu dinero en una cuenta y cada mes el banco le da un pequeño empujón. Ese impulso son los intereses, un porcentaje extra que se suma a tu ahorro total.
Es un documento que muestra todos los abonos y los retiros que has realizado, además de los intereses que ha ganado tu dinero. Podemos decir que es un historial de lo que pasa con tus ingresos, cómo lo has gastado y cuánto te queda.
Es la cantidad total de dinero que tienes actualmente en tu cuenta de ahorro. Es decir, si ahora mismo entras a la app de tu banco, Bi en Línea por ejemplo, verás una cantidad exacta en quetzales o dólares, ese monto es tu capital.
Y ahí los tienes, estos son los conceptos básicos para entender tu cuenta de ahorros y evitar confusiones en el uso de la misma. Recuerda, el primer paso para utilizar de forma óptima una herramienta, es saber cómo funciona.
¡Adelante, aprovecha al máximo tu cuenta de ahorros! Si aún no tienes la tuya, es momento de cambiar eso. Ábrela ahora mismo sin salir de casa, en tan solo 8 minutos. Haz clic en la imagen de abajo para saber cómo.