El crédito bancario es una excelente opción para cumplir tus metas, ya que es un instrumento financiero que te permite pagar la universidad, adquirir bienes o solventar alguna emergencia, por ejemplo.
Antes de hacer una solicitud es importante que entiendas cómo funciona y algunos conceptos clave que te ayudarán durante el proceso para no tomar decisiones que puedan desequilibrar tus finanzas. ¿Deseas hacer una compra importante o consolidar tus deudas? ¡Quédate a leer!
Es una operación financiera que te concede una cantidad de dinero, pero tendrás que devolverlo en un tiempo específico, pagando una cantidad adicional a cuenta de intereses.
Los créditos pueden clasificarse según su uso, por ejemplo si deseas comprar un inmueble o construir una casa, puedes solicitar un crédito hipotecario. Por otra parte, los créditos personales son de uso libre, es decir, puedes utilizarlo para cumplir una meta a corto plazo como remodelar tu casa, viajar o comprar un vehículo.
Al recibir tu solicitud, el banco iniciará el proceso y comprobará tu solvencia con ingresos o estados de cuenta. Además, te solicitará algunos requisitos adicionales como fotocopia de tu Documento de Identificación (DPI), recibo de servicios y el respaldo de un fiador o una garantía.
Al verificar toda la información proporcionada, la entidad financiera establecerá si cuentas con la capacidad de pago requerida y aprobará tu solicitud. En este punto es cuando obtienes el capital que necesitas para cumplir una meta o solventar los gastos ocasionados por un imprevisto.
Recuerda que al adquirir tu primer crédito todos tus movimientos financieros quedarán registrados en un historial crediticio en el Buró de Crédito. Este será uno de los factores decisivos para facilitar que obtengas mejores condiciones de crédito en el futuro.
Por esta razón, es importante que antes de solicitar el crédito o conocer el estimado de las cuotas mensuales conozcas tu capacidad de pago. Te sugerimos que previo a tu solicitud consultes con un asesor para conocer aspectos como la cuota estimada de acuerdo a valores como el monto, el plazo y la tasa de interés, por ejemplo.
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Como ves, un crédito bancario te ofrece muchas ventajas. Además de facilitar la adquisición de un bien, también te ayuda a resolver de forma fácil, rápida y sencilla necesidades puntuales de efectivo. Así, puedes cubrir estos gastos sin poner en riesgo tu tranquilidad y estabilidad económica.
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