Un crédito inmediato al alcance de las necesidades y emergencias de tu empresa está contenido en una tarjeta de crédito empresarial.

Los créditos empresariales deben ser sólo eso y nunca rebasar al ámbito doméstico.

Es una línea delgada y que generalmente ofrece tentaciones, pero un buen administrador de un negocio en crecimiento sabe que esa línea nunca debe ser superada.

La tarjeta de crédito personal se utiliza para necesidades domésticas y nunca empresariales, así que antes de que accedas a ellas, debes tener clara esa división.

Además de la administración, está el tema de los intereses. El emprendedor sabe que el crédito puede ser tanto un impulso como una tumba para su negocio.

Prescindir de un crédito no siempre es sencillo, particularmente si surge una necesidad, así que si tu negocio ya cumple con los requisitos para ello, ha llegado el momento de obtener una tarjeta de crédito empresarial.

La tasa de interés

El Banco Mundial señala que los créditos personales son sustancialmente más caros que los empresariales en una proporción de dos a uno.

Es decir, si tu tarjeta te cobra el 30 por ciento de interés, el rango de lo que te cobre una empresarial debe estar por debajo del 15 por ciento, sino, no es empresarial. El financiamiento es más flexible para los negocios.

Las opciones

Los productos que ofrecen los bancos son esencialmente bajo los mismos modelos aunque cada habrá de agregar lo propio para hacerse más atractivos al mercado:

Tarjeta de crédito corporativa: Se trata de un producto financiero respaldado en los recursos depositados en una cuenta. Los reportes deben especificar qué, cuándo y quién dispuso del recurso para tener una administración controlada. Son muy usadas como tarjetas de crédito para viáticos, ya que así la empresa no tiene que desembolsar por anticipado cuando envía a un empleado a una misión fuera de su entorno.

Tarjeta asociada a un crédito: A través de este producto accedes a un crédito previamente contratado y con condiciones de financiamiento ya fijadas, así que puedes disponer del recurso en el momento que necesites y de antemano sabes cuánto y cómo lo vas a pagar.

Utilizar estas tarjetas siempre significa una responsabilidad, así que ten todos tus documentos en orden y regulariza la situación fiscal de tu organización.

Es importante evaluar si tu negocio tiene la estabilidad para hacerle frente a un crédito, pues este mismo puede convertirse en un obstáculo y no en una ventaja si no se maneja adecuadamente.

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