Hacer compras innecesarias tanto en tiendas físicas como en línea puede afectar significativamente tus finanzas personales sin darte cuenta. Por ello, es importante que tomes conciencia y diferenciar cuáles son las compras imprescindibles o aquellas que son por impulso.
En este artículo, te compartimos algunos tips que serán de ayuda para cuidar tu salud financiera. Spoiler alert! No es una buena idea comprar cuando estás cansado o estresado. ¿Te quedas a descubrir el resto? ¡Vamos, continúa leyendo!
Una de las técnicas más eficaces para evitar las compras no planificadas consiste en dejar un margen de tiempo para que nuestro cerebro actúe de forma racional y tome conciencia de lo que vamos a hacer.
Diez minutos bastan para separar el impulso de la decisión final, así que este lapso de reflexión te ayudará a reprimir el estímulo inicial de compra. De esta manera, además de meditar sobre dicho gasto, buscas otras opciones con precios más reducidos.
Muchas veces visitar una tienda cuando tenemos un mal día nos ayuda a distraernos y levantar el ánimo. Sin embargo, podemos asumir que la mayoría de los gastos serán impulsivos.
Emplear las compras como un medio para sentirnos mejor es algo común, por ello es importante que busques otras actividades que te ayuden a entretenerte y a superar esos momentos, sin que tu bolsillo sufra.
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De acuerdo a un estudio realizado por Lending Tree, aproximadamente un tercio de los compradores dijeron que “casi siempre” gastan más de la cuenta en el supermercado. Así que, antes de hacer tus compras, elabora una lista considerando lo que ya tienes y tu planificación semanal de comidas. De esta manera, saldrás de la tienda con un carro de compras más ligero, con productos que realmente necesitas… ¡tus finanzas te lo agradecerán!
Por otra parte, si visitas tu tienda de ropa favorita y te diriges a la sección de “rebajas”, piensa con antelación cuánto quieres gastar o qué prendas hacen falta en tu armario. Con esta simple acción evitarás llenar tu guardarropa de prendas o accesorios que no necesitas.
Al manejar tus finanzas personales, analiza y piensa si realmente debes comprar ciertos artículos para evitar las compras por impulso. Establece una nueva regla (exceptuando necesidades básicas): “no compraré cierto artículo hasta que pasen X días”. Coloca este recordatorio en lugares estratégicos. Por ejemplo, si quieres comprar unos tenis nuevos, coloca un recordatorio en un clóset para esperar 7 días y así, tomar una mejor decisión respecto a si lo necesitas y puedes desembolsar el dinero.
Cada persona tiene formas diferentes de relacionarse con el dinero, pero el inconveniente de hacer compras no planificadas es que sean superfluas, es decir, aquellas consideradas como lujos sin importar que dispongas o no de los recursos necesarios. Así que te sugerimos que tomes en cuenta estos consejos y orientes tus finanzas personales hacia el consumo responsable.
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