Administrar correctamente tu dinero es una estrategia que puede traerte grandes beneficios a corto, pero sobre todo a largo plazo. Una de las sugerencias que provienen de las finanzas conductuales es considerar la fuerza cognitiva de nuestro cerebro.
No te preocupes si no lo comprendes del todo porque a continuación, te compartimos algunas claves que te ayudarán a tomar excelentes decisiones financieras.
Katherine Milkman, profesora de la Escuela de Wharton de la Universidad de Pensilvania, realizó un estudio en donde encontró que para establecer un nuevo comienzo, las personas utilizan dos tipos de referencias temporales: las sociales y las personales.
Las sociales son aquellas comunes para todos como: los lunes o el inicio de mes, por ejemplo. Por otra parte, las personales son únicas, como los cumpleaños o los aniversarios. Sin importar cuál sea el tipo de referencia, es necesario que aproveches estos momentos, pues tienden a hacernos reflexionar y motivar para cambiar hábitos, como los del ahorro.
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A muchas personas les resulta difícil priorizar el ahorro sobre momentos que pueden disfrutar en el presente, ya que el cerebro está programado para “alejarse” de situaciones que no producen satisfacción. Por ello, es más probable que se tomen decisiones que produzcan felicidad transitoria, incluso si se tienen planificados gastos a futuro.
Visualizar una meta como conseguir las llaves de tu primera casa propia o disfrutar de un atardecer en tu destino soñado, te ayuda a valorar realmente la administración correcta de tus finanzas.
Una manera de alcanzar tus objetivos es reducir el uso de la fuerza de voluntad. Esto es posible si automatizas tus decisiones financieras y no dejas que dependan de la motivación. Esto quiere decir que es importante que tus elecciones estén en “piloto automático” para que se conviertan en un hábito con el tiempo.
Por ejemplo, si se te dificulta pagar tus créditos en el tiempo establecido, fija una fecha cada mes y programa débitos automáticos. De esta manera, te estarás priorizando este proceso y no afectarás tu récord crediticio.
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Si no cuentas con un presupuesto, es probable que gastes dinero en otros objetivos como salir con tus amigos o en entretenimiento del fin de semana. Para evitar caer en morosidad y el pago adicional de interés, te sugerimos que estructures tus gastos fijando un rubro para tus deudas actuales.
Por otra parte, si tus deudas están dispersas o fuera de control, una excelente opción es la consolidación. De esta manera, unificarás todo en un mismo préstamo y obtendrás una cuota más baja al extender el plazo.
Tomar buenas decisiones financieras puede marcar la diferencia con respecto a tu calidad de vida en el futuro. Si sabes lo que quieres, te informas y cuentas con asesoramiento especializado, tendrás una mayor oportunidad de cumplir tus objetivos económicos.
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