El aprendizaje creativo en tiempos de pandemia
Alrededor del mundo se calcula que 773 millones de jóvenes y adultos no cuentan con las habilidades básicas de alfabetización. Los estudios indican que este grupo de personas tienen muchos desafíos como baja motivación para aprender, pocas habilidades digitales y contextos de pobreza que representan problemas para poder sufragar sus modos de vida. Las personas tienen regularmente otras prioridades que tienden a ser mucho mayores que las prioridades de educación; deben generar ingresos y atender compromisos con el cuidado de sus hijos[1]. En este sentido, el ofrecer una formación atractiva y creativa hace la diferencia y puede atraer a los educandos.
El Instituto de la UNESCO para el Aprendizaje a lo Largo de Toda la Vida publicó recientemente un estudio sobre el aprendizaje abierto y a distancia para la alfabetización de jóvenes y adultos (UNESCO, 2021), en el cual remarca que este tipo de enfoque es clave para mejorar la situación actual y garantizar la continuidad de los aprendizajes y el desarrollo de las habilidades a lo largo de la vida, con el fin de no interrumpir los servicios de alfabetización. Algunas de las herramientas de apoyo son los materiales impresos, el uso de la radio, la televisión y en el mejor de los casos los recursos tecnológicos.
Fundación Ramiro Castillo Love enfrentó el reto de continuar brindando educación a adolescentes, jóvenes y adultos desde el año 2020 con el inicio de la crisis por la pandemia por el COVID-19. La metodología y estrategias de enseñanzas fueron adaptadas a los diferentes contextos en los cinco departamentos donde se ejecuta el Programa Me Educo: Chiquimula, Jalapa, Sacatepéquez, Sololá y Totonicapán. Esto con el fin de no interrumpir el proceso de alfabetización y proveer educación primaria acelerada a cientos de guatemaltecos, sobre todo mujeres y en contextos rurales.
El Programa Me Educo en 2022 continúa brindando oportunidades. El proceso de enseñanza aprendizaje se da por una parte de forma domiciliar en pequeños grupos de máximo 5 personas y, de acuerdo a la situación del COVID-19, pueden ser mayores tomando las medidas de bioseguridad. Asimismo, se cuenta con textos y cartillas impresas innovadoras y adaptadas a los estudiantes, además de Programas Radiales de apoyo a la formación. Los tutores atienden en horarios flexibles de acuerdo a las necesidades de los educandos y enseñan con la metodología de aprendizaje invertido para poder aprovechar al máximo el tiempo de visita a los hogares, es decir, los estudiantes deben tener tiempo de preparación antes de la llegada de sus docentes. En algunas ocasiones los medios electrónicos son utilizados, como el uso de los teléfonos celulares. Adicionalmente, para complementar la formación se cuenta con el componente de Productividad y Desarrollo en donde se ejecutan proyectos económico productivos; también el componente Tecnológico donde aprenden herramientas informáticas y el componente Nutricional, en donde los padres de familia reciben orientaciones técnicas.
[1] UNESCO (2021). “Guidelines on open and distance learning for youth and adult literacy”. UIL, UNESCO.
