Independizarse es uno de los pasos más grandes que se dan en la vida, pues implica un nuevo camino, retos y, por supuesto, mayores responsabilidades. Esto es algo que apasiona a cualquiera, pero también puede ser agobiante si no sabes cómo administrar las finanzas.
¿Estás a punto de dar este gran paso? Toma nota de estos consejos, te ayudarán a lograrlo y a disfrutar de esta nueva aventura:
Empieza con una lista de aquellas cosas que necesitarás desde el inicio y que no son gastos periódicos. Incluye ropa de cama, accesorios para cocinar, platos, cubiertos, escoba e incluso muebles para tu ropa o una estufa.
Por último, considera el costo de mudanza. No es una compra, pero es buena idea considerarlo dentro de estos gastos.
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Lo primero a considerar será el alquiler que pagarás. Este varía de una zona a otra, ten en cuenta esto. En algunos lugares, se incluyen servicios como luz, agua e internet, pero si no los incluye considéralos en tu presupuesto.
Luego, la compra de víveres, productos de higiene personal y de limpieza. Termina con gastos como el transporte a tu trabajo, pagos de deudas si tienes o servicios de streaming. Esto te ayudará a calcular cuánto dinero necesitarás mensualmente para sobrevivir.
Ya sea para cubrir una factura médica, reparar goteras o reemplazar un electrodoméstico dañado, contar con un ahorro al que puedas recurrir siempre es una buena idea. Lo mejor es que sea un fondo específico para emergencias y no tu ahorro normal.
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Al independizarte sentirás la libertad de tomar tus propias decisiones y es normal que quieras disfrutar el estilo de vida que siempre soñaste. Es probable que quieras salir con tus amigos cada fin de semana, comer en restaurantes o comprar cosas que siempre quisiste. Sin embargo, es fácil terminar derrochando el dinero y que tu presupuesto para gastos esenciales resulte reducido.
Por eso, debes ser realista y saber qué puedes permitirte y qué no, incluso con qué frecuencia. La mejor manera de evitar caer en excesos es hacer un presupuesto y priorizar los gastos mensuales y tu ahorro.
Independizarte es un gran paso y una experiencia gratificante, pero viene acompañada de desafíos y responsabilidades. Planificar tus finanzas con anticipación facilitará la transición y te evitará muchas preocupaciones. Tienes la vida por delante, así que prepárate para disfrutarla.
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