El inicio del temporal de lluvias implica un dolor de cabeza para muchos conductores. Las probabilidades de sufrir un percance incrementan, aún si somos conductores experimentados, una ligera llovizna podría causar que nuestro auto derrape o choque, eso sin contar los daños que puede tener por dentro y por fuera. Por eso es importante conocer de antemano los posibles problemas y fallas que aquejarán a nuestro vehículo, al igual que las formas de evitarlas.
La lluvia cae sobre las partículas de polvo que se encuentran en la carrocería de tu vehículo, estas son arrastradas y se pegan en ella dañando lentamente la pintura de estas zonas.
Al entrar a nuestro carro con los zapatos mojados con lodo, podemos llegar a dañar el tapizado. También el agua puede filtrarse en el interior de nuestro carro y dañar otras piezas.
Cuando las lluvias son continuas y duran mucho tiempo, la humedad puede entrar en zonas profundas como el cableado, fundas de estos cables, fusibles u otras partes eléctricas del auto.
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Como ves en temporadas de lluvia es muy importante manejar con precaución, así evitarás causarle daños innecesarios a tu vehículo. Así que, ¡no lo pienses más! Practícalas desde hoy para proteger tu vida y la de todos los que te rodean.
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