El proceso de arrendar una casa puede ser muy desgastante y complicado, en especial si eres el arrendador, pues hay muchos detalles que usualmente pasamos por alto y, por prisas o ignorancia, cometemos errores que nos pueden arruinar los ingresos del bien inmueble. Así que, ¡presta atención! Y evítalos a toda costa.

La verdad es que ser arrendador implica poner atención a muchísimas cosas como la evaluación de inquilinos, la creación de un contrato de alquiler, verificar los gastos de mantenimiento, entre otros. Esto puede ser un poco estresante ya que puedes tener en mente además tus quehaceres y problemas de la vida diaria, haciendo que puedas cometer errores o dejar pasar detalles importantes en el proceso.

Por esto, hemos decidido recopilar los 4 errores que debes evitar a toda costa al querer alquilar tu propiedad. Así, te puedes asegurar de no cometerlos para que todo el proceso sea más fácil y se dé sin ningún problema.

1. Mostrar la casa en malas condiciones

Aunque no lo creas, este error es uno de los más comunes a la hora de poner una casa en alquiler. Las personas suelen solo tomar fotos de la vivienda en el aspecto que se encuentra y no se molestan por arreglar un poco. Este es un grave error pues, ¿quién quisiera comprar algo que está desordenado, feo o malo?

La verdad es que la estética sí importa en estos casos, así que procura subir fotos de espacios ordenados, limpios y bien decorados; así, podrás atraer más la atención de buenos inquilinos. Asimismo, procura tener todo limpio y como nuevo si alguien visita la casa para dar una buena impresión.

2. Decidir un precio sin hacer una investigación

El precio es un factor muy importante pues afecta el interés de los inquilinos y además establece cuánto vas a generar en tu inversión. Sin embargo, uno de los mayores errores es que los arrendadores no suelen investigar el precio promedio del mercado de alquiler de las casas de la zona o los precios de mercado. Es preciso que estudies el mercado de alquiler. Busca otras casas similares y sus precios, haz comparaciones, verifica las ubicaciones, servicios y demás aspectos que puedan afectar el precio y brinda una buena oferta.

3. No dedicarle tiempo al acuerdo de alquiler

Muchos arrendadores no le dan importancia al estudio de inquilinos y al acuerdo de alquiler, pues por las prisas prefieren saltarse este paso. Sin embargo, es preciso que establezcas una guía de cómo se vivirá y se administrará tu propiedad. Es tu casa, deben ser tus reglas.

Hay casos en que los inquilinos incluso construyen dentro de las casas y no queremos que esto te suceda. Así que dedica tiempo al contrato de alquiler y especifica bien todo lo que quieras como si aceptas mascotas o no, etc.

4. No asesorarte con un profesional

El proceso de ser arrendador puede ser muy complejo si no cuentas con alguien que te asesore y ayude. Así que, contratar los servicios de alguien es una muy buena opción para disminuir la carga y salir con todos los detalles que deberías evaluar. Además, ellos tienen mucha más experiencia y el proceso se puede volver más rápido.

Si sigues estos consejos podrás sacarle el máximo provecho a tu inversión. Crea costumbres saludables, un crédito hipotecario puede ayudarte a comprar esa casa para que puedas arrendarla como inversión. Si quieres más información, ¡No dejes pasar esta oportunidad dando clic a la imagen de abajo!