Una empresa enfocada busca que la gestión administrativa, comercial y operativa de la empresa dirija sus esfuerzos hacia un solo objetivo, ya que la falta de enfoque tarde o temprano llevará a la empresa a perder competitividad y pone en riesgo su permanencia en el mercado.

A continuación, se detallan algunos enfoques a considerar:

Enfoque hacia la producción

Se da cuando los consumidores prefieren productos que tengan alta disposición (presencia en muchos puntos de venta y de forma masiva) y con un coste bajo.

En este caso, el escenario es el de un masivo mercado potencial, una escasa oferta y segmentos de mercado desconocidos. La venta es fácil, pero el papel del marketing tiene grandes limitaciones.

Enfoque hacia el producto

Ocurre cuando nos enfrentamos a un mercado nuevo o a un mercado que está dominado por una única empresa que oferta (monopolio).

La empresa no se preocupa por las ventas, pues las tiene aseguradas, limitando su actividad comercial únicamente a mejorar el proceso de producción y la calidad del producto.

Enfoque hacia las ventas

Sucede cuando el mercado está en una fase expansiva y existen varias empresas compitiendo por liderarlo, por lo que el esfuerzo se enfoca en el aumento de las ventas.

Seguramente se tratará de un producto nuevo, por lo que el consumidor no será demasiado exigente y lo comprará principalmente en función de su precio.

Enfoque hacia el mercado

Cuando el mercado es sólido y los consumidores conocen perfectamente el producto, el enfoque de comercialización varía.

A partir de ahí, es necesario que las empresas conozcan los gustos, preferencias, necesidades y deseos de los compradores potenciales para adaptar los productos a dichos criterios.

Enfoque hacia la marca

Cuando competimos en los mercados de alta intensidad, las marcas deben liderar los procesos de comercialización, como principal activo de una empresa.

Si los mercados están saturados (exceso de oferta), las empresas tratan de seguir estrategias de segmentación de mercados para introducir productos enfocados hacia los estilos de vida de sus consumidores objetivo.

La marca será el elemento clave para generar la percepción que provoque una actitud positiva hacia sus productos y servicios, influyendo de manera decisiva en las decisiones de compra de los consumidores.

El emprendimiento empresarial se refiere a la persona que inicia una nueva empresa o proyecto.

¿Qué es emprendimiento? Es aquella actitud de la persona que le puede permitir emprender y tener nuevos retos, nuevos proyectos, es lo que te puede permitir avanzar más o que puede ir más allá de donde has llegado.

Importancia del emprendimiento empresarial

Hoy en día, se ha ganado una gran importancia debido a las necesidades de muchas personas que logran su independencia y su estabilidad económica.

Los niveles de desempleo y la calidad de empleo existentes, han creado nuevas necesidades a las personas, entre ellas se pueden nombrar las siguientes:

- Las necesidades de generar sus propios negocios

- Inicio de sus propios negocios

- Pasar de ser empleados a ser emprendedores.

Todos estos puntos son posibles si tienes un espíritu de emprendedor.

Características del emprendimiento empresarial

- Hay que tener la capacidad de compromiso, tanto consigo mismo como con los demás.

- Debemos tener una vocación de trabajo casi todos los días para sacar las iniciativas por delante.

- Tener una buena constancia en la que se juntan por la perseverancia y la fe, si el emprendedor no se cree por sí mismo el proyecto que está haciendo, estará destinado a fracasar.

- Empuje: capacidad para poder sacar las iniciativas adelante, por hacer sacrificio y entrega por las ganas de cumplir los sueños.

- Debemos tener coraje y un gran entusiasmo para poder realizar toda clase de ideas. (debemos tener movimiento continuo).

- Obtener un buen conocimiento para poder ser un emprendedor, y que debes requerir un buen entendimiento en los temas que vas a desarrollar, tanto en tus proyectos o actividades.

- Su cultura, saberse adaptar a las diversas situaciones y saber comportarse ante las circunstancias.

- Ilusión: entusiasmo, motivación, entre otras. Son unas de las mejores opciones, que tienes que tener en tu primer paso. (Nueva iniciativa)

- Confianza en ti mismo, deben afrontarse a sus ánimos en las peores épocas y tener muy claro que no siempre se consigue ni en un día o dos.

- Debemos ser optimista las cosas se pueden ver por un lado mucho mejor, pero no implica que caigan.

- Tener capacidad de actuar y querer aprender, debemos conocer y esforzarnos por aprender lo que sepamos.

- Ser muy paciente, es nuestro mejor aliado, así que el emprendedor debe saber crear y hacer crecer sus temas de corto a largo plazos.

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