El sedentarismo en la oficina puede causar no solo lesiones musculares sino también enfermedades.
Las que comúnmente consideramos lesiones deportivas, como la tendinitis, pueden producirse en la oficina simplemente por adoptar una mala postura ante la computadora o no usar el mobiliario adecuado.
El permanecer demasiado tiempo sentado también puede causar problemas circulatorios, mientras que algunas actividades pueden resultar en accidentes de distinta gravedad.
Las lesiones o padecimientos más comunes en la oficina son:
- Dolores cervicales
- Lumbalgias
- Contracturas musculares
- Desgarros musculares al cargar objetos pesados
- Fracturas al caer de escaleras o bancos usados para alcanzar objetos altos
- Padecimientos cardiovasculares
- Diabetes
- Obesidad
- Enfermedades metabólicas
- Depresión
¿Cómo evitarlos?
Entre las acciones preventivas que puedes adoptar en la oficina para combatir el sedentarismo y prevenir las distintas lesiones y padecimientos están las siguientes:
- Usar mobiliario ergonómico que se ajuste al cuerpo y sea cómodo.
- Ajustar la altura de tu silla en relación con el escritorio y tu computadora para que adoptes una postura recta y tu vista esté a la altura de la pantalla.
- Asegurarte de que tus brazos queden en ángulo recto en relación con el teclado y usar almohadillas para sostener las muñecas y evitar la tendinitis.
- Programar descansos de cinco minutos cada hora, para reposar tu vista y mejorar tu circulación deambulando por la oficina.
- Hacer ejercicios para evitar el sedentarismo que te ayuden a relajar el cuello y mover brazos y piernas.
- Ser cuidadoso al mover objetos pesados o desplazarlos de un sitio a otro.
- Colocar correctamente la escalera o banquillo donde tengas que subir.
- Ser cuidadoso con el manejo de sustancias tóxicas.
También importa lo que hagas fuera de la oficina
En general, también debes llevar un estilo de vida saludable que incluya una alimentación balanceada, una buena hidratación y una actividad física constante cuando estés fuera del trabajo.
La prevención es la clave del buen estado físico, pero cuando surgen síntomas o sufres lesiones es importante acudir al médico para que dé un diagnóstico y tratamiento adecuados.
Un seguro médico es una buena inversión en tu salud pues cubre todos los gastos de consultas, exámenes de laboratorio, medicamentos, cirugías y tratamientos que pudieras necesitar.
Sé proactivo en el cuidado de tu salud. Evita los hábitos que puedan causarte lesiones en la oficina y adopta los que beneficien a tu bienestar general.
Y, ante el menor síntoma o lesión, busca la ayuda de un especialista médico que te oriente sobre el mejor tratamiento para recuperarte rápidamente.
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