Si tú, como millones de personas, has hecho alguna vez un gran propósito en la víspera de Año Nuevo, sabes la verdad sobre los objetivos. Es muy difícil fijarse unos buenos, y aún más difícil cumplirlos.
En lugar de repetir este ciclo autodestructivo, ¿por qué no examinas tu enfoque y descubres en qué te estás equivocando?
1. Establecer objetivos vagos
La idea de establecer objetivos que sean específicos, medibles, alcanzables, relevantes (es decir, que sean fundamentales para tu vida o trabajo) y con un plazo de tiempo determinado puede parecer una tontería corporativa. No lo es. Ignorar cualquier componente de la fijación de objetivos SMART hace que sea más difícil seguirlos, pero la especificidad es especialmente importante. Te da algo para actuar, no sólo para soñar.
2. Establecer objetivos demasiado optimistas
Una actitud positiva es algo maravilloso. Pero asegúrate de equilibrarla con una dosis de realismo, o podrías encontrarte mal preparado para seguir adelante. Es probable que surjan obstáculos inesperados, así que piensa en lo que podría salir mal y resérvate un poco de tiempo cuando fijes tus objetivos.
3. Dejar que el miedo dirija la fijación de objetivos
La otra cara del exceso de optimismo es la fijación de objetivos basada en el miedo. No dejes que el miedo a fracasar te frene. Tus objetivos deben ser lo suficientemente ambiciosos como para impulsar el cambio y el crecimiento personal.
4. Establecer objetivos demasiado grandes.
Si quieres convertirte en el líder del equipo de tu grupo para finales de año, encabezar el lanzamiento de un nuevo producto, representar a tu empresa en tres conferencias clave y aprender más sobre marketing, ¡agárrate!
5. Centrarse sólo en los objetivos a corto o largo plazo.
Muchos expertos recomiendan establecer unos pocos objetivos grandes a largo plazo, y equilibrarlos con objetivos más tácticos a corto plazo que reflejen metas semanales o incluso diarias (e idealmente, algunos o todos estos objetivos pequeños alimentarán sus objetivos grandes).
6. No hacer un seguimiento.
Una vez que hayas fijado un gran objetivo, no te des una palmadita en la espalda todavía. Tienes mucho trabajo duro por delante para conseguirlo. Si aceptas esta verdad y creas un plan de acción, llegarás a la meta.
7. Negarse a recalibrar o abandonar los objetivos que no funcionan.
Las cosas cambian, y a veces nuestros objetivos también deberían hacerlo. Una nueva contratación podría cambiar las áreas de interés de su equipo. Las finanzas de tu empresa podrían cambiar de rumbo repentinamente. Tu propio crecimiento y aprendizaje podrían impulsar una nueva visión. No caigas en la trampa de ignorar lo que ocurre a tu alrededor (o dentro de ti). Revisa tus objetivos con regularidad -semanal suele ser lo mejor para los objetivos a largo plazo, y diario para los de corto plazo- y haz ajustes en el camino. Incluso puedes decidir abandonar un objetivo: no hay que avergonzarse si deja de tener sentido perseguirlo.
8. Dejar que el fin justifique los medios.
Lance Armstrong quería ganar. Kenneth Lay quería que las ganancias de Enron siguieran subiendo. Bernie Madoff quería ganar mucho dinero. Ninguno de estos objetivos es malo en sí mismo. Pero algunos triunfadores se involucran tanto en sus objetivos que comprometen su ética. Puedes intentar mantener la perspectiva consultando a amigos de confianza si empiezas a obsesionarte con un objetivo.
9. Centrarse en ser el mejor en lugar de mejorar.
¿Persigues objetivos que te permitan probarte a ti mismo? ¿O los que te ayudarán a mejorar? Este último enfoque suele ser más saludable. Y las pequeñas mejoras pueden suponer un gran progreso con el tiempo.
10. Competir, en lugar de colaborar, para alcanzar los objetivos.
La consecución de objetivos en el trabajo suele requerir el trabajo en equipo. En lugar de intentar superar a tus compañeros, hazles partícipes de tus objetivos, habla de lo que quieres conseguir y obtén información sobre tus progresos a intervalos regulares.
AAP - FranklinCovey
FranklinCovey: Firma global de consultoría y capacitación en ejecución estratégica, liderazgo, confianza, productividad, lealtad del cliente y desempeño en ventas.
Web site: www.franklincoveyguatemala.com
Correo: infogt@franklincovey.com.gt
Facebook: FranklinCovey Guatemala
Teléfonos: 2361-4503 | 2219-2503