El funcionamiento y la rentabilidad de tu negocio depende en gran medida del cuidado correcto de tu flotilla de autos comerciales. Así que capacitar a tus colaboradores, además de desarrollar un sistema de gestión, será de gran ayuda para optimizar el uso de los recursos y mejorar los procesos internos.
Una flotilla comercial forma parte del patrimonio de tu empresa y, por lo tanto, una de tus responsabilidades es sacarle el máximo provecho. Por ello, en este artículo compartiremos contigo algunos tips para que cuides de ella.
Revisa el estado del aceite del motor
El aceite es el encargado de lubricar y proteger el motor del vehículo. Además, reduce el desgaste causado por la fricción de diferentes piezas y ayuda a disminuir el consumo tanto de combustible como de las emisiones de CO2.
Nuestra recomendación es que cumplas con las indicaciones del manual del fabricante para extender su vida útil. También es importante que lleves un registro del rendimiento del motor basado en factores como el nivel de aceite y el kilometraje.
Verifica que los frenos funcionen correctamente
Lo más aconsejable es que revises los pedales, los discos y el líquido de frenos al menos una vez al mes para detectar deficiencias. De esta manera, contribuyes con la seguridad de tus conductores y evitarás problemas mecánicos a futuro.
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Limpia la carrocería del auto
La carrocería es la zona más expuesta a la lluvia, al polvo y a los golpes. Protegerla es el primer paso para asegurar que un auto perdure en el mejor estado tanto como sea posible. Esto también es importante, ya que si decides venderlo en el futuro, tendrá una buena percepción de su valor.
Tener un carro limpio no es sólo una cuestión estética. Al lavarlo correctamente eliminas todos los restos de suciedad, los cuales pueden ser dañinos para la pintura y te permite detectar con más facilidad fallas como derrames de aceite, por ejemplo.
Toma medidas de seguridad
Adicional, te sugerimos que evalúes constantemente el estado de las luces de tu flotilla para que tus colaboradores conduzcan de forma más segura por la noche o cuando el clima se torna complicado.
Otro de nuestros consejos es que reemplaces el parabrisas cada 6 meses para mejorar la visibilidad en esos días lluviosos. Además, debes verificar frecuentemente la presión de las llantas y su estado para reducir la probabilidad de un accidente.
En conclusión, si deseas que tu flotilla rinda al máximo y forme parte de tu patrimonio por muchos años más, es recomendable que lleves un registro del estado de cada vehículo y priorices los distintos cuidados que te compartimos.
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