Lograr finanzas personales sanas no depende únicamente de tus ingresos ni de tener cero deudas. Significa tener la capacidad económica de enfrentar los gastos imprevistos sin impactar tu presupuesto. Es necesario lograr un equilibrio entre tus ingresos, gastos y deudas, sin olvidar el ahorro.

Para formar el hábito del ahorro es importante tener disciplina y sobre todo, una correcta administración del dinero. Esto implica ajustarnos a un presupuesto y evitar dejarnos llevar por los impulsos de las compras no planificadas. ¿Quieres adquirir prácticas financieras saludables? A continuación compartiremos contigo algunos beneficios. 

Alcanzar tus metas

Una de las principales ventajas es que te permite hacer realidad tus planes y alcanzar tus objetivos. Por ejemplo, si quieres adquirir una casa o un carro, el ahorro es clave para pagar el enganche o tener un “colchón” financiero en caso de tener gastos adicionales a la compra.

Disfrutar de un futuro económico saludable

Es necesario que desde la juventud adquieras hábitos saludables para aspirar a un mejor futuro financiero. Aunque al principio pueda verse como un proceso complicado, con el paso del tiempo disfrutarás de mejores oportunidades y tendrás una vida más tranquila. 

Obtener disciplina y constancia

Aunque no siempre resulta fácil ahorrar, este hábito fomenta la disciplina, ya que evitas ciertos gastos actuales para disfrutar de grandes beneficios en el futuro. Además, este proceso requiere una dosis de voluntad, que te será de gran ayuda para conseguir otros objetivos personales.

Si quieres adquirir prácticas financieras saludables, pero aún no cuentas con la disciplina necesaria, puedes optar por un Plan de Ahorro con aportes programados. Con este Plan podrás ahorrar de forma automática mediante débitos de tu cuenta monetaria o tarjeta de crédito.

Prepararte para sobrellevar imprevistos

Estamos expuestos a que nuestras finanzas se vean afectadas por imprevistos como una enfermedad, un accidente o eventos inesperados como la pérdida de un empleo. En cualquiera de estas situaciones tener un fondo de emergencia será de ayuda para afrontar estos gastos sin desequilibrar tu economía personal o endeudarte innecesariamente. 

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Aunque puede verse como una oportunidad para personas con altos ingresos, en realidad cualquier persona puede hacerlo si tiene la disciplina, el autocontrol y sus objetivos claros. También te recomendamos mantener tus gastos variables bajo control.

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